Cierro los ojos, te veo ahí en
frente y te diriges hacía mí. Por un momento levantas tu cabeza, me
miras y ahí es cuando tus hermosos labios dicen mi nombre. Segundos
pasan para que cada músculo de mi cuerpo se paralice, me falte el aire,
me tiemblen las piernas.. Ahí es cuando haré el enorme esfuerzo porque
no me falle la voz. Me encanta que estés ahí y me llames, es música para
mis oídos, nunca es tan bonito mi nombre como en tu boca. De esa boca
de la que sólo pido besos, miles, millones, billones de besos por todos
los lugares de mi cuerpo. Y ese día quiero un "te quiero",
que me digas que lo sientes tanto como yo. Quiero fundirme en el abrazo
más cálido, tanto que sienta ardor por mi cuerpo. Quiero quemarme
contigo. Tenerte ahí delante diciendo que me quieres, que
sí, soy el amor de tu vida. Porque quizás tardaste tanto,
quizás toda la vida porque yo lo tenía claro cuando ya era una niña.
Pero no importa, yo te esperé toda mi vida, y ahora por fin escucho esa
hermosa melodía. Sí, la melodía de tus te quiero.. tantos besos,
caricias hasta que se acabe mi piel y me dices:"quiero que seas mía para siempre".
No hay comentarios:
Publicar un comentario